El día que dejó de nevar en Alaska


El día que dejó de nevar en Alaska, Alice Kellen
5/5 estrellas
Páginas: 354
Editorial: Titania
Hola :) Hoy os traigo reseña de esta maravillosa e intensa novela llena de amor, ternura e intriga. Porque una novela romántica también puede ser misteriosa.


Sinopsis
Heather cree que solo hay tres cosas que sabe hacer: atraer problemas, salir huyendo y correr. Así es como termina en Alaska, en un pequeño pueblo perdido, trabajando de camarera mientras intenta llevar una vida nueva y tranquila. Su único problema es que no de los dueños del restaurante parece odiarla y que ella nunca antes ha conocido a nadie que despierte tanto su curiosidad. Nilak es reservado, frío y distantes, pero Heather puede ver a través de todas esas capas tras las que se esconde y sabe que en ocasiones hay recuerdos que pesan demasiado; como los de sus propios errores, esos que intenta dejar atrás.
Argumento
Heather es una chica de San Francisco que se escapa a Alaska después de algo grave que ha puesto su vida del revés.
Allí, en el pequeño pueblo de Inovik Lake, conoce a algunos de sus habitantes y poco a poco empieza a disfrutar de una vida tranquila, viviendo en la casa junto al lago y trabajando de camarera. Intentando dejar atrás todos sus fantasmas.
También conoce a Nilak, quién hace que su deseada vida tranquila se convierta en un torbellino diario, intentando descifrar la manera de actuar de ese trozo de hielo con patas. A veces parece odiarla, otras la ayuda, pero enseguida vuelve a comportarte de manera arisca, malhumorada y esquiva.
En un pueblo perdido de Alaska, Heather tendrá que cavar hondo para descubrir qué esconde el corazón de hielo de Nilak, y al mismo tiempo, ahondar en sí misma para dejar atrás todos esos demonios que la atormentan.
Opinión
Maravillosa. Excelente. Increíble. Tierna. Dulce. Adictiva. Intensa. Explosión de sentimientos <3
Me gustaría empezar hablando del lugar donde se desarrolla el libro. Inovik Lake. ¿Puede ser más idílico ese lugar para enamorarse? Un pueblo pequeño, donde todos los habitantes parecen ser familia. Una cabaña junto a un lago que se hiela en invierno, con las montañas nevadas como fondo perfecto, una chimenea y muchos libros para leer en calma, sin escuchar nada más que el silbido del viento.
Vale. Echaría de menos Internet (la tele no, pero Internet sí). Estamos acostumbrados a la tecnología y sería difícil al principio. Pero creo que, en cuanto me acostumbrase, sería tan feliz de vivir allí que dejaría de necesitar el mundo globalizado para siempre.
Por otro lado están los habitantes de ese pueblo, tan ariscos por fuera, pero tan buena gente por dentro. A mí me han enamorado todos, sobre todo Naaja, la adorable abuelita inuit, y John, ese hombre rudo que da hasta miedo pero con el corazón blandito como la nieve.
Y no puedo dejar de mencionar a Caos, el perrete protagonista de la historia. Mi primer crush literario perruno. Su adorabilidad es infinita.
Pasemos a hablar de los protas:
Heather, la protagonista y narradora. Es una chica que ha pasado por mucha mierda y que le echa dos ovarios a la vida para escapar de todo y empezar de cero en Alaska, en un minúsculo pueblo al lado de un lago. Ni más ni menos. Amé a Heather desde el primer momento, y cuanto más conocía de ella más la amaba. Sufrí y lloré con esta chica a cada rato, pero también me reí, disfruté y me enamoré, claro.
Heather es una mujer fuerte, aunque pueda parecer débil e indefensa a veces. Ella siempre consigue salir adelante, a pesar de todo el sufrimiento, y eso me enamora de ella.
Y por otro lado está Nilak, el trozo de hielo con patas. Un chico hosco, huraño y desagradable. No habla con casi nadie, más allá de monosílabos, no ríe, no parece disfrutar de nada de lo que le ofrece la vida. Parece estar en el mundo solamente porque lo han obligado, pero que por él se iría al infierno a la primera de cambio.
A Heather la trata muy mal desde el primer momento. Desde el segundo uno en que la ve, empieza a odiarla y a huir de su presencia. La simple existencia de Heather parece hacerle hervir la sangre.
Sin embargo, también os digo que, a pesar de su mal carácter o sus feas palabras hacia Heather, se hace querer desde la primera página. Yo sentí desde el principio que estaba roto, que algo le pasaba para que se comportase así, y no pude adorarlo más. Nilak se hace amar, y conforme más lees y más lo conoces, más lo quieres.
Heather se siente atraída por él en cuanto lo ve. Claro, el chico es guapísimo, moreno, ojos azules, alto, musculoso... Sin embargo en cuanto abre la boca, Heather se da cuenta de que no vale la pena suspirar por una persona tan hosca como él. Pero por mucho que ella quiera creer lo contrario, este mal trato y las actitudes contradictorias de Nilak (porque mismo la manda a la mierda como le lleva las bolsas...) no hace si no aumentar la curiosidad de Heather hacia el muchacho.
En resumen, es un libro precioso, intenso, lleno de amor y dulzura. Me he sentido con el corazón en un puño el 50% de las páginas, y el otro 50% me las he pasado con el corazón alborotado, latiendo como un loco. Está lleno de enseñanzas, de almas rotas que se cruzan para curarse mutuamente, de perros adorables (Sí, hay muchos <3), de superación y segundas oportunidades, de personajes increíbles. También de drama, tristeza, y corazones rotos. Pero, como en la vida, nunca hay nada perfecto. No hay blancos ni negros. Siempre grises :) Y esa falta de perfección en la historia, es lo que la hace tan especial.
Una de las mejores cosas de este libro es que es romance, dulce, tierno y romántico, pero no es empalagoso. Además, hay un misterio que te envuelve durante toda la novela y que mantiene la intriga casi hasta el final.
He de confesar que desde las primeras páginas, sospeché como acabaría. Tuve bastante claro desde el principio lo que había pasado y pasaría en líneas generales (obviamente no adiviné todos los detalles xD). Pero, a pesar de ser bastante obvio cuál sería la resolución de ese misterio que lo envuelve todo, nunca llegué a confiarme al 100%, y me pasé toda la lectura inventando nuevas teorías que me resultasen creíbles y que me convencieran de que mi primera sospecha no era lo que de verdad iba a pasar, porque no me gustaba, no me gustaba nada.
Por desgracia, esa sospecha que no me gustaba nada resultó ser cierta. Y aún así, el libro fue precioso, especial y me llegó a la patata como un rayo fulminante.
PD: Nilak se suma a mi harén de maridos literarios ;)

«Pero, a veces, la vida te da una segunda oportunidad. La nieve empieza a derretirse. Y todo encaja.»



Y hasta aquí por hoy mi gente bonita. Espero que os haga gustado y que, si os apetece, me deis amor en forma de comentarios :)

Comentarios

  1. Hoooola!!
    Tengo muchisisimas ganas de leer este libro!! Me encanta que aunque intuyeses como acababa tu mente no dejase de crear teorias distintas!
    Un abrazo!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario